Parque Güell

(Fotos: 12/11/2003)
El Parque Güell, un símbolo del modernismo: es sin duda el más visitado de Barcelona y uno de sus mayores signos de identidad, como tal, no podría quedar sin ser visitado a la llegada de Marichu, Francisco Alejandro y María Gabriela. Declarado monumento histórico-artístico en 1968, esta obra maestra de Antonio Gaudí, permite disfrutar de la naturaleza y la arquitectura al tiempo que ofrece una panorámica privilegiada de la ciudad. Situado en la montaña del Carmel, fue un proyecto financiero de Eusebio Güell, que pensó en construir una ciudad jardín y se la encargó a Antonio Gaudí.






Del proyecto inicial sólo se llegaron a construir dos casas (una de las cuales alberga el museo Gaudí) dentro del recinto del parque, que se conservó como tal y que ahora es jardín municipal. Esta obra es típicamente modernista, y establece los inicios de la técnica 'trecandis', que utiliza pedazos irregulares de azulejos como material de recubrimiento.

El acceso al parque está flanqueado por dos pabellones de planta ovalada y con complejos tejados recubiertos por fragmentos de cerámica. Si la bienvenida no defrauda, el interior menos, donde destaca la originalidad de sus elementos: una señorial escalinata con una fuente, varias esculturas zoomórficas y un dragón policromo. El famoso lagarto que adorna la entrada, que en tantas postales y fotos estará plasmado.







Pero si de verdad algo llama la atención es la Sala de las Cien Columnas, de inspiración dórica, la terraza con banco-balaustrada, de trazo sinuoso y forrado de cerámica y que constituye para algunos críticos a Gaudí como el precursor del arte abstracto. Con todos estos elementos Gaudí consiguió crear un parque en el que se conjugan a la perfección la naturaleza, la plástica y la arquitectura. Se dice que vienen a ser como soportes similares al de un baston cuando una persona reposa sobre el.
Nos encontramos con caminerias conformadas de materiales naturales, donde Gaudi conjuga armoniosamente, la piedra y la vegetación para exaltar aromas e imagenes en los distintos parajes del parque, la vista exalta por demás el aire de tranquilidad, el romantisismo y la escencia de eso que muchos como yo, conocimos acá en Barcelona y admiramos en sus obras....








El parque se llena de parejas, amigos, familias, turistas... donde estas y formas parte del espacio y eres uno más en su obra....




Continuara...

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