Cielos Cruzados

He aprendido desde la carencia, a valorar cada pequeña meta de mis logros, a respetar su alcance y a disfrutar mi esfuerzo. He aprendido a desprenderme de imposibles y de muchos otros que aunque he tenido, jamás han satisfecho mis sueños. He aprendido a que con cada paso que podamos dar día a día, se llega a cualquier meta, y que por más lejos que creas estar, siempre se llega!. He tenido que sobreponerme a baches y entender cualquier tropiezo, he tenido que ser paciente en todo, porque, sólo así, puedo tener la calma necesaria para continuar, he alimentado mis pasión, una fabulosa y única herramienta, esa que todos tenemos y que tal vez no muchos dispongan. He decidido mi destino, con fallos y aciertos, con éxito y fracaso también, pero, sobre todo;........ He sido yo. F. Jiménez

A veces las luces se hacen sombras, y el viento no tiene más sonido que colores, y esos despejados y oscuros horizontes, que se atreven a llegar, son tan solo pasajeros despidiendo otro día más. El tiempo pasa y tan solo deja respirar el recuerdo, ese, que ya hace tiempo se cruzo en el camino, y que hoy, y ayer, y hace no mucho,  tan inocente  se atrevió asomar parte de su píe, y pisando quizás alguna vieja grieta, ha podido transformar alguna sonrisa en tristeza. Hoy asomó sus manos y apretó, eso! el recuerdo,  y exprimió  aquella última gota de esa agría bebida. Ojala pase pronto, y que como ya es de todos una verdad, llegue aquella cálida y blanca luz, esa que nos llena de risas de muchos colores y canciones bellas. Es necesario caminar seguro, contar con una buenas y sólidas raíces, es prescindible continuar de pie, y vencer cualquier barrera, hoy tal vez han faltado algunos sonidos, algunas buenas canciones, pero, como siempre, el sol saldrá!, se nece

No sé cómo expresarles todas las emociones que me embargan desde que llegué a Venezuela, debo decir que me han atendido muy bien, desde el agente en inmigración, el chófer del autobús al hotel, en el hotel y luego el chófer que nos trajo a Caracas, no podía esperar menos, hemos sido siempre un pueblo amable. Iniciamos nuestro camino desde Maiquetía a Caracas. Mi asombro se queda inerte tras cada metro que andamos en el coche, pues mi cuerpo se llena de aires y recuerdos, de sentimientos añorados y de un cúmulo de muchas cosas. Mis ojos tratan de no mirar, pero, me es imposible estar ausente; deterioro, una miseria que arropa cada pedazo de montaña, cada rostro, cada espacio donde alcanzo la mirada, puestos de controles militares, persona que a nuestro pasar diviso, no reflejan mucha alegría, tan solo una conforme y pesada situación, una pena no oculta, pero si, callada. Pasamos los túneles boquerón 1, 2 y el último que por fin me deja apreciar de nuevo … ¡Caracas!... ¡Vaya,

La verdad que estas dos semanas he vivido o más bien, revivido, mis aquellos tiempos pasados cuando iniciamos la universidad, cuando todo a tu alrededor cambia, y empiezas a disfrutar de la charla de los compañeros de estudio, de los pasillos, los salones y como siempre, nuestra recordada "cantina" (así le llamamos en Venezuela al cafetín de los colegios y universidades), los días de clases, el levantarte temprano, el estudio, y también por supuesto, la tensión y el estrés de culminar a tiempo las actividades y cualquier otro "deber" (por llamar de otro modo a las tareas) que se nos solicite. Toda una nueva experiencia y reto, no crean que es fácil, pero, tampoco imposible. Aún recuerdo mis inicios en el año 1982 (UCLA, Venezuela), y es que ha pasado mucho tiempo, y aún el ir a clases, despierta en mi las ganas de saber, sobre todo, en estas nuevas áreas de la tecnología, desarrollos web, redes sociales e Internet, aunque es verdad y difícil negarlo, tengo

Cielos Cruzados: Bienvenidos días : Me despierto y tras unos pasos me detengo, sentarme por un rato frente a mi balcón y tan solo mirar pasar el día,                     ...

Me despierto y tras unos pasos me detengo, sentarme por un rato frente a mi balcón y tan solo mirar pasar el día,                                               ........ Melodía. Si por un instante me despierto y me pierdo en aquel horizonte que no tengo, tan solo puedo regresar cuando tu me miras                                               ........ Vida mía. Pero, tal vez en algún momento,  y de eso no tengo duda  se despistan las palabras y los sueños y se alejan de mis ojos hasta tu cuerpo                                               ........ Alegría. Y con un despertar tan ligero y un dormir tan ajeno, mis sueños se despiertan por momentos  y te buscan como siempre                                              ........ Poseía. Despierto y miro a través de mi ventana un nuevo y radiante día llegar,  quédate aquí por un momento, tan solo deja que me logre despertar. Y de nuevo voy a mi balcón y agradezco cada uno de los días, que he tenido la gran suerte